Opinión
Mi segunda reseña es la tercera parte de los chicos del calendario de
Candela Ríos. Me habría gustado poder escribir las reseñas de los dos primeros
libros pero he llegado tarde, (¡Cuidado! Spoilers de los anteriores libros), aun así me gustaría hablaros un poco de mi
impresión general acerca de la saga. Os confieso que soy una fan incondicional
de estos libros, me encanta la idea y me parece muy original. Además para las
que viváis en la parra como yo, la propia autora Candela Ríos tiene un blog y
un canal de Youtube donde cuelga los vídeos de los chicos del calendario
después de que finalice cada mes, es decir, los videos que ella describe en los
libros, existen. ¿Existirá Salvador Barver?
En esta tercera entrega Candela tiene una confrontación interna con
sus sentimientos, recordemos que en el segundo libro, Salvador le jugó una mala
pasada y ella intentará camuflar, incluso canalizar sus sentimientos y decirse
a sí misma qué es lo mejor para ella, pero queridas, todas sabemos que donde
manda el corazón no hay cabida para la lógica y que las teorías distan mucho de
la realidad, y es que en la práctica seríamos capaces de tropezar mil veces con
la misma piedra antes de afrontar nuestros sentimientos.
Candela decidirá darle una oportunidad a Víctor, recordemos que es el
chico de marzo, y aunque a priori se repelían como agua y aceite, al final
Candela descubrirá en él a una gran persona y se convertirá en bálsamo para
paliar el camino pedregoso que ella había transitado junto a Salvador. Víctor
es el chico del que podríamos enamorarnos fácilmente, es un chico atento, que
no le da miedo demostrar sus sentimientos y que si se trata de hacer feliz a
Candela, será el primero y no dudará en esperarla el tiempo que ella necesite.
Pero, ¿es realmente lo que Candela necesita? ¿La vía fácil siempre es la
correcta?
“Hablar con Abril siempre me anima […] Tal vez ella tenga razón y las relaciones fáciles son esas en las que no está involucrado nuestro corazón, pero yo no lo veo tan claro. Algo puede ser sencillo y a la vez complejo. Nuestro corazón básicamente hace lo que quiere y, si se enamora de alguien quizá no consigamos hacerle entrar en razón por mucho que lo intentemos, o quizá lo que sucede es que el amor no entiende de razones, sino de emociones. ¿Cuánto tardas en querer a alguien? ¿Y en dejar de quererlo? Si el corazón entendiera de razones olvidaríamos a la gente que nos ha hecho daño en un abrir y cerrar de ojos, pero no es así. Tal vez incluso habríamos inventado una pastilla: píldora para dejar de querer. Me da miedo pensar que sería todo un éxito.”
Centrémonos en el proyecto laboral de los chicos del calendario.
Los meses van pasando y Candela irá recorriendo toda la península
conociendo a grandes hombres que también tienen sus batallas internas y que se
dejarán descubrir por una Candela que siente la necesidad de arreglar causas
perdidas.
En mayo viajamos a Madrid para conocer a Javier que
es veterinario y se dedica a colaborar con protectoras de animales en contra
del maltrato animal. Es un encanto de persona y tendrá que lidiar con un pasado
que creía cerrado y que, con la llegada de Cande volverá para quedarse, quiera él o no.
En junio conduciremos hasta Segovia, allí nos espera
un arquitecto que decidió dejarlo todo y convertirse en chico de mantenimiento
de un geriátrico, Alberto. El también tendrá su historia personal y nuestra
chica del año no dudará en arreglar las grietas de su vida y hacerle un poquito
más feliz.
Y finalmente en julio cogeremos un avión hasta
Mallorca, allí nos recibe Jhon, con su séquito de mujeres florero y un manager.
Jhon es surfista profesional y si no hay una cámara delante no le interesa lo
más mínimo nadie más que él. Será un mes complicado para el proyecto, porque ni
siquiera Candela lo ha elegido chico de julio…
Durante este trasiego de viajes la vida de Candela dará un giro
brutal, y cuando lleguéis al final creedme si os digo que necesitaréis unos
minutos para asimilar toda la traca que está por llegar. No quiero desvelar
nada pero si puedo aseguraros que es un libro intenso, y con el añadido de dos
capítulos escritos desde el punto de vista de Víctor y Salvador.
¿Creéis que será fiel a
sus sentimientos? ¿Acabará esta lucha interna que mantiene consigo misma?
¿Esperabais este final del libro?
